La última edición de Supervivientes All Stars ha sido definida como una de las más duras del formato en años. Parece que el tiempo y los inconvenientes climatológicos van de la mano con las duras pruebas que ha incluido la organización en esta última entrega, ya que los concursantes se han vuelto a enfrentar una nueva jornada de lluvias y oleaje en medio de la alerta por temporal que viven en los Cayos Cochinos

Como se ha podido ver en la última hora avanzada por Telecinco en sus habituales adelantos, los robinsones han comenzado a ver las señales de lo que luego se convertiría en un aguacero que les obligaría a tomar medidas. Aunque, en un principio, veían el vendaval en el horizonte y sobre el mar mientras trataban en la playa intentando descansar de la dura noche previa en la que no habían podido dormir, la lluvia comenzó a ir en aumento mientras los concursantes descubrían con perplejidad el fuerte oleaje que creaba un paisaje de película. Un escenario que volvía a ponerles en disparadero de una noche delicada.

El optimismo de Adara y un refugio improvisado

Frente a la desolación de los participantes contrastaba el ánimo de Miri o Adara apelando a la capacidad del grupo para salir adelante: "se supone que somos leyenda", explicaba Adara.  Un sentimiento que no terminaba de compartir Torres, dando un golpe de realidad al concurso de sus compañeras "…como nos venga de golpe...". En ese momento y tras su comentario, el superviviente comenzaba a intentar buscar soluciones para apaciguar el golpe en medio del miedo visible de algunos de sus compañeros como Gloria Camila que trataba de apercibirse “voy a empezar a guardar cosas por si acaso”. Seguidamente se disponía a fabricar un refugio bajo tierra en vez de meterse dentro de la lona como sus compañeros.