‘GH 20’ llegaba a su final este jueves, y desde Mediaset ya han dejado entrever cómo será esta gala en la que Aquilino, Cristian, Raúl y Rocío se jugaron el suculento botín de 300.000 euros. Jorge Javier Vázquez ha sido el encargado de ejercer como maestro de ceremonias, en medio de una noche repleta de nervios, emociones y donde el reality pretende rescatar una de sus míticas tradiciones. Para empezar, cada uno de los finalistas ha podido cumplir tres deseos concedidos por el Súper; además de contar con visitas de familiares, recibir mensajes de apoyo e incluso actuaciones musicales.

De igual modo, desde la cadena les han concedido la oportunidad de poder resolver ciertas cuentas pendientes con concursantes que ya están expulsados. Así, procuraban mostrarles un resumen de su convivencia, al mismo tiempo que en la aplicación de Mediaset Infinity las votaciones permanecían abiertas. La pasada noche del jueves, la casa de Tres Cantos cerraba sus puertas en medio de una las ediciones más cortas de su historia, dejando paso a los VIPS. De igual modo, y como viene siendo habitual, ha sido el ganador de la edición anterior, -Juan Quintana-, el encargado de entregar el maletín al concursante que finalmente se alzaba con la victoria.

Pero, antes de proceder a la entrega del premio, Quintana protagonizaba un divertido número de baile junto a un grupo de bailarinas. Lamentablemente, esta edición ha pasado sin pena ni gloria por la cadena, con unas tristes cifras de audiencia que no han terminado de cumplir con los objetivos que habían estipulado. Y es que desde que se entrenase el pasado 6 de noviembre, ‘GH 20’ ha ido agonizando tanto en prime time como en el tramo del access, llevando a Telecinco a tomar medidas tan drásticas como retirar la tira diaria o recortar el ‘Debate’ de los domingos. Este jueves, ha sido el público quien ha tenido la última palabra, de cara a decidir cuál de los cuatro finalistas se merecía ganar una edición que desde la cadena preferirían dejar en el olvido y enterrada para siempre.