Helena y Rodri por fin se han reencontrado cara a cara después de varias semanas poniéndose a prueba. Sin embargo, después de que el joven tuviese la oportunidad de ver imágenes en directo de su novia en Villa Playa, la situación le superaba por completo y terminaba pidiendo una hoguera de confrontación. Sobre todo, al ver a Helena besándose con Barranco en el jacuzzi delante de su foto. “Le están comiendo la cabeza, no me sirve para nada, solo la estoy viendo criticarme otra vez, no tiene vergüenza”, se lamentaba. “Consiente que se ría de mí todo el día. ¿Qué hace con mi foto ahí? ¿qué le he hecho yo? ¿soy tan malo? ¿crees que no la quiero? Que estoy todo el día jodido", sentenciaba. Ahora, la pareja por fin ha podido reencontrarse y hablar en persona todo aquello que les ha dolido. La tensión se palpaba nada más comenzar y es que Rodri ya había hecho una firme advertencia: “Te vas a arrepentir”. Así, Helena entraba caminando por la pasarela de antorchas con mucha determinación y estallaba en una oleada de reproches hacia su novio. “Me pareces un egoísta de mierda, ¿por qué me has pedido una hoguera? ¿Has visto una conexión real y te has cagado?”, le echaba en cara ella.

Una reacción que descolocaba por completo a Rodri: "¿Encima vienes así y tienes los coj* de mirarme a la cara después de lo que me has hecho?", alegaba él por su parte. Mientras que Helena se mantenía firme y afirmaba con bastante contundencia que se había dado cuenta de que su pareja había intentado hundirla y que por eso había estado reprimida. “No eres mi salvador, estaba cegada, vine echa una mierda", explicaba en la hoguera ante la atenta mirada de Rodri y también de Sandra Barneda.

Sin embargo, parece que el joven tendría una versión muy diferente y es que él considera que "ella se deja influenciar", recordándole que habían venido al programa para que precisamente fuese ella quien le demostrase a él que podía confiar. Algo ante lo que Helena ha replicado, explicándole el importante papel que ha jugado su tentador, Barranco, durante toda la experiencia. “Cuando llegué aquí he estado muy hundida, Barranco es un tío maravilloso, me entiende y escucha. Los últimos meses no te reconocía, me sentía sola y me he dado cuenta que nos queríamos mal. Me cambiaste muy drásticamente, he abierto los ojos”, ha concluido tajante. Mientras tanto, la tensión ha ido escalando, lo que incluso obligaba a Sandra Barneda a intervenir para pedirles que no se faltasen al respeto y se respetasen uno al otro.