‘GH 20’ sigue avanzando a pasos agigantados, y los concursantes ya están viendo que el juego no será nada fácil. Sobre todo, porque la organización les da sorpresas tan desagradables como una expulsión inesperada. Lorena era la escogida para abandonar la casa de Tres Cantos, lo que ha caído como un jarro de agua fría entre sus compañeros. Y a eso se sumaron acercamientos, nuevas confesiones y unas nominaciones cara a cara que consiguieron caldear todavía más el ambiente.

Cristian, Aquilino, Desirée y Joon pudieron respirar tranquilos al conocer que no eran expulsados, dejando la decisión final en un duelo compuesto por Belén y Lorena, siendo finalmente esta última la escogida por el público para abandonar el reality. "La audiencia ha decidido que debe abandonar la casa... ¡Lorena!", anunciaba Ion Aramendi. Y ella, entre lágrimas, se aferraba al brazo de su compañera antes de asumir “la derrota”. “Si la audiencia no me quiere ver, no pasa nada”, reconocía afectada. “Si la vida tiene otros planes para mí, tampoco pasa nada”. Además, dejaba muy claro lo orgullosa que se sentía por haber llegada tan lejos y haber podido vivir de primera mano la experiencia. Además, decidía sincerarse por completo con el presentador y le explicaba que le pareció bastante injusto haber salido nominada la semana pasada. “Para mi punto de vista, fue un poco injusto que yo saliese y me callé”, señalaba al respecto.” Al final me ha tocado irme. No me pareció justo, pero bueno. Había que coger el "toro por los cuernos" y me ha llevado a mi casa", concluía resignada, convirtiéndose en la cuarta expulsada de la edición. Mientras tanto, dentro de la casa también se han ido desarrollando otras tramas. Por ejemplo, la marcada por el distanciamiento entre Iñigo y Edurne, a raíz de que ella decidiese ponerle un freno a su incipiente relación. Y es que parece ser que la joven tan solo busca una amistad y no quiere complicarse. “Solo amistad, no va a haber nada más, lo tengo muy claro”, le aseguró a su compañero.