El uso del champú en seco todavía está rodeado de muchos mitos, y es que este producto ha conseguido en poco tiempo ganarse un hueco imprescindible en los tocadores y bolsos de millones de mujeres. Sobre todo, por su capacidad para transformar nuestra melena en poco tiempo. Pese a ello, sigue rodeado de muchos rumores que desde Batiste se han encargado de desmontar. El primero de ellos, es también uno de los más extendidos, y es que apunta a que el champú en seco puede sustituir al lavado tradicional. “No está pensado para reemplazar el lavado con agua y champú, sino para espaciarlo”, advierten los expertos. Es más, su función sería la de “revitalizar el cabello entre lavados, absorber el exceso de grasa en la raíz y devolver el volumen y la sensación de frescor al instante”. Según explican los expertos capilares, Batiste no pretende sustituir el lavado habitual, sino ser un aliado práctico para mantener el pelo con buen aspecto durante más tiempo. “Su uso regular ayuda a que el cuero cabelludo no se reseque por un exceso de lavado y, al mismo tiempo, aporta textura y cuerpo al cabello”, afirman. El segundo de ellos, viene relacionado con el hecho de que el producto puede dejar residuos, y es que la clave estaría en cómo lo aplicamos. En el caso de Batiste, está formulado con almidón de arroz, un ingrediente ligero y natural que absorbe el sebo sin apelmazar ni dejar residuos visibles. “Cuando se aplica correctamente, el Champú en Seco no deja restos blancos ni sensación pegajosa.

Lo que se nota es una melena más suelta, con volumen y un aroma fresco”, aseguran. ¿El truco? Agitar bien el envase, aplicar a unos 30 centímetros de distancia y masajear con las yemas de los dedos. El tercero de los mitos apunta a que puede resecar el cuero cabelludo. Todo lo contrario, ya que al espaciar los lavados tradicionales, evitamos eliminar los aceites naturales que protegen el cabello. “Muchas personas creen que necesitan lavar el pelo a diario porque se les engrasa rápido, pero en realidad el lavado constante estimula las glándulas sebáceas”, detallan. “Con productos como Batiste, el cuero cabelludo se autorregula y el cabello se mantiene limpio por más tiempo”. También estaría el falso mito de que este tipo de champú en seco solo funciona en los cabellos lisos, lo que tampoco sería cierto, puesto que Batiste puede usarse en todo tipo de cabellos, incluidos los rizados o con textura. “Al no necesitar agua ni calor, mantiene la estructura del rizo intacta y ayuda a conservar su definición y volumen natural”, aseguran desde la marca. Por último, tampoco sería cierto el hecho de que el champú en seco solo debe usarse cuando tenemos el pelo sucio. Y es que Batiste es mucho más versátil de lo que parece. No solo sirve para esos bad hair days o para disimular el exceso de grasa, sino también como herramienta de styling.