Así intenta equilibrar tu cabello el equilibrio emocional: pistas claves de cara al otoño
La caída de cabello estacional que se produce durante el otoño podría haberse agravada por ciertos factores físicos que pueden deteriorar la salud capilar
Durante el otoño, nuestra salud capital se resiente sin casi poder remediarlo, y es que muchas veces podemos encontrarnos con el cepillo y la ducha repletos de pelo. ¿El principal motivo? El ciclo de vida del cabello pasa por tres fases: anágena (en la que el pelo crece), catágena (un período de transición) y, por último, la telógena (etapa de caída). El otoño coincidiría precisamente con esta última etapa, sumada a otros factores como la “disminución de la luz solar, la caída de las temperaturas o los cambios hormonales”.
Sin embargo, no todos los factores detrás de la caída del cabello serían físicos, ya que generalmente “el otoño es una época de renovación”. “Así como los árboles sueltan sus hojas, nuestro cuerpo también se desprende de aquello que ya cumplió su ciclo”, explica Sandra Blázquez, peluquera holística y embajadora de Booksy. “Más allá de los factores biológicos, desde una mirada holística, este momento refleja algo más profundo: una invitación del cuerpo a soltar y a equilibrarse”. Y es que mientras que durante el verano acumulamos “estrés, calor o exposición solar”, en otoño nuestro cuerpo procura recuperar su ritmo interno. “Cuando el cuerpo está en calma y nutrido, el cabello florece. Sin embargo, cuando hay tensión, el flujo de energía que lo alimenta se bloquea”, explica. Y advierte que “vivir en modo supervivencia nos desconecta del cuerpo y apaga el brillo del cabello. Por eso, la caída otoñal no es un problema, sino una señal”. De esa forma, el cuerpo nos recuerda que es tiempo de “descansar, de cuidarnos y de soltar lo que ya no necesitamos, igual que hace la naturaleza”. En cuanto a técnicas para paliar la caída del cabello estacional, Boosky recomienda consultar con un peluquero holístico (el otoño es buen momento para un corte y diagnóstico personalizado), el uso de productos orgánicos o un ritual semanal de autocuidado. Además, también recomiendan cuidar la alimentación y el descanso, al igual que evitar el calor excesivo o tratar el cabello con el mimo que se merece.