Todo sobre el diagnóstico de apego maternal filial
El vínculo entre madre e hijo es uno de los fenómenos más difíciles de explicar para los expertos
El vínculo entre una madre y un hijo no es fácil de explicar. Muchos expertos hacen hincapié en que sobrepasa el ámbito de las emociones para convertirse en una conexión única y eterna, aunque resaltan que durante el primer año de vida es cuando más intensamente se vive. Desde Clínicas Eva, la doctora Isabel Viesa señala el microquimerismo fetal como el responsable de este vínculo. Se trata de la presencia de las células fetales en los tejidos maternos y viceversa, de manera que tanto en la gestante como en el feto pueden coexistir dos tipos celulares distintos.
La transmisión de estas células puede darse a través de la placenta a lo largo de todo el embarazo, siendo el primer trimestre el momento más común para producirse. Las células del niño se suelen instalar en el neuroepitelio olfativo materno, el cual puede llegar a actuar como un factor protector de la depresión, dada la función y la localización de esta zona con respecto al cerebro materno.
Este fenómeno es positivo para la madre ya que puede ser un escudo frente a las enfermedades autoinmunes, ayudando a la regeneración de tejidos. No obstante, es importante destacar que el hecho de que haya diferentes células en el organismo de la madre puede potenciar ciertos problemas inmunológicos en la gestante, ya que el cuerpo puede reaccionar contra ellas como si fueran células invasoras.
El tiempo que el organismo maternal tarda en eliminar las células de bebé es todo un misterio. Según la experta mencionada, podría llegar a permanecer incluso décadas. Si la madre se queda de nuevo embarazada en este período indefinido de tiempo existe la posibilidad de que se de un microquimerismo entre hermanos, sobre todo si son gemelos, ya que puede ser receptor también de estas células. Es por ello por lo que no se descarta la posibilidad de que el hermano mayor pueda transmitir una enfermedad al menor.
Por último, Isabel Viesa también resalta que, aunque las células sean de un donante en las técnicas de reproducción asistida, también se puede dar el microquimerismo en estos casos, lo cual afianza el vínculo entre la gestante y el futuro hijo.