La conexión entre Joel y Nataly ha sido evidente desde que comenzó la octava edición de La isla de las tentaciones. No obstante, nadie pensaba que el catalán fuera a caer en la tentación. Pero así ha sido. En el último episodio, tras sincerarse con sus compañeros sobre las dudas que tiene en cuanto a sus sentimientos por Andrea, su pareja, el joven se metía en el jacuzzi con Andrea y terminaba dejándose llevar por la pasión, haciendo saltar la alarma de la otra villa.

“¿Me estás tocando el culo? Yo te dejo”, comenzaba a decir Nataly mientras abrazaba a Joel en el jacuzzi. En ese momento comenzaban a acercarse cada vez más y era entonces cuando se fundían en un apasionado y largo beso. “Espero no arrepentirme después”, decía Joel. Nataly le preguntaba que por qué lo había hecho y él argumentaba que tan solo le apetecía. “Tengo que pensar en mí ahora y ser egoísta”, justificaba.

“Nataly besa muy bien. Es la primera chica que beso después de tres años estando con Andrea. Pero al final ha pasado lo que tenía que pasar”, explicaba frente a las cámaras. Horas más tarde, Joel confesaba que se había liberado de dar ese paso con Nataly pero que realmente desde el beso no ha podido dejar de pensar en Andrea y en todo lo que había pasado. “Tengo un poco la cabeza echa un lío”, explicaba.

Al sonar la alarma, Andrea no pudo evitar venirse abajo. “Cada vez estoy más sensible y me afecta más la luz de la tentación. Tengo esa cosa de que pueda estar avanzando Joel con Nataly […] Tengo ese miedo de que pueda ir avanzando con ella y que pueda llegar al beso. No sé si mi mente haría clic o me derrumbaría ya del todo”, decía.